Lo primero de todo, es poner a cocer las patatas, para más adelante preparar el puré. Mientras se cuecen, preparamos el pato. Yo utilicé un confit de pato que se vende envasado al vacío, ya cocinado. En el envase vienen las indicaciones de preparación: en horno o microondas unos minutos. Yo lo tuve en el microondas a temperatura máxima y en 5 minutos lo tuve listo.

Pelamos y troceamos la manzana reineta y la metemos al microondas. Cuando esté blandita, la reservamos.

Cuando tengamos las patatas, las aplastaremos con un tenedor, junto con la manzana. Añadiremos sal y pimienta al gusto y un chorrito de aceite de oliva para dar una textura más cremosa a la mezcla.

Por otro lado, deshuesamos el confit y troceamos la carne.

Para completar el plato, picaremos en juliana las 2 cebollas y las freiremos en aceite. Cuando la cebolla esté transparente, le pondremos un chorrito de Pedro Ximénez y dejamos al fuego hasta que esté bien cocinada.

Ya sólo queda montar el plato. Utilizamos un molde metálico para ir colocando capas:

- Primero una capa de puré de patatas con la manzana.

- Después una capa de pato troceado.

- Por último, ponemos la cebolla.

Es un plato resultón que se puede preparar rápidamente. Mientras se fríe la cebolla, se pueden ir cocinando el resto de indredientes en el microondas (incluso las patatas).

A la cebolla, para caramelizarla, se le puede añadir una cucharada de azúcar moreno, pero preferí aligerar de calorías la receta. Otra sugerencia para conseguirlo, es retirar el exceso de aceite de la sartén antes de añadir el Pedro Ximénez a la cebolla.

El puré de patatas con el toque a manzana y la cebolla con el sabor a pasas que le da el vino, combinan muy bien con el pato asado.