Pon el agua a hervir con un poco de sal. Mientras, corta la cebolla muy fina, y ponla a pochar en la sartén a fuego medio (yo siempre uso aceite de oliva virgen extra del pueblo de mi padre, Huesa (Jaén).

Lava bien los calabacines y con el pelador quita sólo los golpes que tenga, deja el resto de la piel.

SI para entonces ya ha hervido el agua, echa un chorro de aceite, y pon los espaguetis a cocer. A mi me gustan al dente, y para eso hiérvelos sólo los minutos que indique tu envase.

Corta el calabacín en taquitos, pon el fuego de la cebolla más fuerte, para que los taquitos de calabacín queden salteados.

Baja el fuego de la sartén, y echa unos 200gr de nata líquida para cocinar.

Añade dos cucharadas soperas de salsa de pesto.

Añade un poco de pimienta blanca.

Pruébalo, y añade sal al gusto si es necesario.

Cuando estén listos los espaguetis, escúrrelos y en la misma olla en la que los habías cocido, deja que se deshaga una cucharada de mantequilla con el propio calor residual.

Echa los espaguetis escurridos en la olla, y la salsa con cebolla y calabacín.

Revuelve y ¡listo para servir!

Una receta rápida, fácil y ligera, para comer pasta con algo de verdura. Los espaguetis que más me gustan son los barilla nº5. Siempre hago caso del tiempo de cocción echándolos cuando ya ha roto a hervir el agua, porque al mezclar con la salsa y poder conservar el calor si no se quedan ya demasiado blanditos.