Ponemos en una batidora el plátano (que habremos troceado y congelado previamente), el cacao o la algarroba, los frutos secos, la canela, la vainilla y un par de cucharadas de kéfir, y empezamos a batir.

Vamos batiendo y añadiendo el kéfir necesario sin pasarnos o, en vez de un helado, obtendremos un batido ;)

Vertemos en una copa y adornamos.

¡A disfrutar!

¿Tienes algún plátano bien maduro en la cocina que amenaza con pudrirse? Pues trocéalo, congélalo y ¡estate atento a esta receta! Te sorprenderás.

Me encanta el helado, pero el problema es que los que venden en los supermercados o en los puestos callejeros son unos productos altamente procesados, con una cantidad exagerada de azúcares añadidos, almidón de maíz, aromas, jarabe de glucosa, emulgentes, estabilizantes y otras sustancias responsables del sabor característico de cada variedad. Delicioso... Los helados artesanales son la mejor opción, pero no siempre los tengo a mano.

¿La solución? ¡Hacer mi propio helado en casa! Pero ¿tendré que comprarme una heladera, otro cachivache más para mi minúscula cocina? ¡Qué va! Vamos a hacer un helado ¡con un plátano congelado! Obtendrás un helado exprés: en cinco minutos estarás disfrutándolo. Y estará cremoso, en su punto justo para meter la cucharilla. ¡Ideal para impacientes! :)

En mi dieta de adelgazamiento sin prisas, sin pasar hambre y sin privarme de mis caprichos, tomo a diario chocolate o algarroba, frutos secos y frutas. Incluso las más calóricas como el plátano o el aguacate. ¿Por qué no juntarlo todo en esta deliciosa merienda? Un par de veces por semana me permito esta delicia, ¡anímate a probar!